Jose Ignacio Sbrocco
para LA NACION
SAN MIGUEL DE TUCUMAN.- El destino de los recursos que el gobierno tucumano tiene previsto usar el año próximo se mantiene en reserva como un secreto de Estado. Ningún legislador, ni oficialista ni opositor, obtuvo copias del cálculo previsto para 2011, un año electoral. Sólo conseguirán, dos días antes de la sesión, dos carillas con los montos designados a cada repartición del Poder Ejecutivo.
El gobernador peronista José Alperovich envió a la Legislatura el proyecto oficial, que prevé gastar 9800 millones de pesos en el próximo ejercicio, 20% más que en 2010. Alperovich, un gran aliado de la Casa Rosada, inició su gestión en 2003 con un presupuesto de 1200 millones de pesos, sancionado en el último tramo de la gestión de Julio Miranda.
La Cámara fue convocada para tratar el presupuesto el 30 de este mes. El oficialismo tiene asegurada la sanción del presupuesto, aunque ningún legislador pueda conocer en qué se gastarán los recursos públicos: Alperovich controla a 44 de los 49 integrantes de la Legislatura, que es unicameral.
El presidente subrogante del cuerpo, Regino Amado, que ocupa el cargo desde que Juan Manzur pidió licencia para asumir como ministro de Salud de la Nación, confesó que no se daban copias del presupuesto a los legisladores porque eran muchas hojas. La Legislatura podía gastar $ 108 millones este año y luego obtuvo una ampliación presupuestaria de $ 17 millones más.
El presidente de la comisión de Hacienda de la Legislatura, José Alberto Cúneo Vergés, dijo ayer a La Nacion que no se entregaban copias para "evitar distorsiones y que trascienda a los medios".
Cúneo Vergés, uno de los ex ministros de Economía de Miranda, defendió la postura oficial de no dar copias a los legisladores. "Si quieren consultar algo, pueden hacerlo en la secretaría de la Comisión. Allí pueden tomar nota de lo que quieren. No se dieron copias de los anexos, nada más", justificó, en diálogo con La Nacion.
El legislador opositor Esteban Jerez (Bloque Alberdi) dijo que el gobierno pretende usar discrecionalmente fondos públicos para la campaña del año próximo.
"El Gobierno tiene dos cajas para el año electoral: la Secretaría General de la Gobernación y la Secretaría de Coordinación de Municipios y Comunas. Entre las dos reparticiones tiene para usar casi $ 90 millones", detalló el ex diputado nacional.
Riña de gallos
De la Secretaría General de la Gobernación, surgen todos los subsidios que entrega el gobierno de Alperovich. Para el año próximo, tiene previsto utilizar unos $ 42 millones.
Para asistir financieramente a las comunas rurales (pequeñas localidades de hasta 5000 habitantes) y municipios, se destinarán $ 46 millones de pesos. "Se destina más dinero para las riñas de gallo que para incluir a los chicos que tienen discapacidades", se quejó Jerez, sobre el uso de los fondos provinciales.
Según pudo observar el legislador opositor, para las riñas de gallos se incluyeron $ 104.000 y sólo $ 20.000 a la Subsecretaría de Integración de Niños con Discapacidad.
"¿Para qué quieren usar esa plata, si con el pacto fiscal Alperovich paga los sueldos en las comunas y municipios y a través de un fideicomiso se pagan las obras públicas?", se preguntó Jerez.
La partida para las comunas rurales y municipios es para atender sus desequilibrios financieros, una suerte de Aportes del Tesoro Nacional (ATN) versión tucumana. "Es para uso discrecional, más en un año electoral", criticó Jerez.
El legislador dijo que iba a presentar un amparo en la Justicia para que impida que se sancione el nuevo presupuesto si es que no consigue que le entreguen las cifras que piensa usar el gobierno.
"Es vergonzoso", dijo Federico Romano Norri, presidente del radicalismo tucumano y legislador provincial. "No puede ser que no tengamos los elementos necesarios para aprobar o rechazar el presupuesto, que son los fondos que piensa usar el Gobierno el año que viene", reclamó.
"Tenemos que hacer un estudio pormenorizado de los gastos, y para eso necesitamos los datos. Si el Gobierno no los da, es una falta de transparencia vergonzosa", se quejó, en diálogo con La Nacion.
De las 300 carillas para examinar los gastos para el año próximo, los 49 legisladores sólo contarán con dos páginas que contendrán sólo los montos globales que se entregarán a cada repartición.
Con esa escueta información, los legisladores oficialistas podrán sancionar el presupuesto para 2011.
No hay comentarios:
Publicar un comentario